Venecia. Ponte di Rialto.
Venecia. Gran Canal desde el Ponte degli Scalzi.

Florencia, desde la Piazzale Michelangelo.
Florencia, Campanile desde la cúpula del Duomo.
Siena, Piazza del Campo.
Siena. Fachada del Duomo.
Una maravilla de viaje. Otro tema fue el regreso a la patria. El domingo por la noche nos enteramos que, a pesar de las buenas noticias de los medios de comunicación, nuestro vuelo del martes (Ryanair: Bolonia-Madrid) estaba cancelado. La tarde del lunes conseguimos cambiar los billetes por internet para el día siguiente, volando desde Pisa (en la web de la compañía ese vuelo no figuraba cancelado y sabíamos que otras compañías seguían operando desde ese aeropuerto), a donde llegamos a la 1 de la mañana tras un viaje de 5 horas en tren y bus. Allí vemos en las pantallas que todos los vuelos están cancelados. Nos ofrecen volar el fin de semana. No me fio de Ryanair. Vuelta a Florencia. En la estación de tren nos dicen que sólo hay billetes Milán-Barcelona para el viernes por la noche, a la friolera de 450 euros por barba. Al final conseguimos un vuelo Florencia-Madrid para el miercoles con Meridiana. Si no sale, la siguiente opción es un ferry desde Livorno a Barcelona: 16 horas!!! Finalmente el vuelo sale sin problemas y regresamos desde Madrid en el ALSA.